Efesios 3:8 Reflexión | Cuando la gracia abre caminos imposibles

Reflexión bíblica de hoy:

Cuando la gracia abre caminos imposibles

La gracia de Dios es un regalo inmerecido, y precisamente por eso tiene un poder transformador incomparable.

No se trata de lo que somos capaces de hacer, ni de los méritos que podamos alcanzar, sino del amor infinito de un Dios que decidió acercarse a nosotros con brazos abiertos.

El apóstol Pablo entendía que no había nada en su vida que lo hiciera digno de ser portador del evangelio, y sin embargo, fue escogido por la gracia.

Esto nos recuerda que la gracia no se trata de lo que éramos, sino de lo que podemos llegar a ser en Cristo.

La gracia nos levanta cuando caemos, nos da nuevas oportunidades cuando creemos que todo está perdido y nos recuerda que en el plan de Dios siempre hay esperanza.

Ese favor inmerecido es la razón por la que seguimos adelante, porque aunque nuestra debilidad es evidente, Su poder se perfecciona en ella.

La gracia no solo nos perdona, también nos impulsa a cumplir el propósito para el cual fuimos llamados.

Cada vez que aceptamos la gracia de Dios, reconocemos que nuestras limitaciones no son un obstáculo para Su obra.

Lo que parecía imposible se vuelve posible, lo que parecía terminado se convierte en un nuevo comienzo.

La gracia nos enseña que nadie está demasiado lejos para ser alcanzado por el amor de Cristo.

¡Suscribete y Recibe el Diario de Oración Gratis!

    Quiero recibir los mensajes estos días:

    Respetamos tu privacidad. Puedes cancelar en cualquier momento.

    Nos motiva a levantarnos con la seguridad de que no importa cuán grandes sean nuestros errores, Su misericordia es aún más grande.

    Aceptar la gracia no significa vivir sin responsabilidad, significa vivir con gratitud y con el deseo de honrar al Dios que nos regaló una nueva vida.

    La gracia cambia nuestra perspectiva: ya no caminamos intentando ganar el favor de Dios, sino disfrutando del favor que Él ya nos dio.

    Nos invita a dejar atrás la condena, a perdonarnos a nosotros mismos y a vivir confiados en la libertad que proviene de Cristo.

    Cada día es una oportunidad para experimentar la gracia de manera fresca, porque el amor de Dios nunca se agota.

    Esa gracia es la que nos da valor para enfrentar las dificultades y la que nos recuerda que, aunque el mundo nos señale, Dios ya nos justificó.

    Cuando abrazamos la gracia, dejamos de vivir como víctimas de nuestro pasado y comenzamos a vivir como testimonios vivos de la fidelidad de Dios.

    Esa misma gracia que alcanzó a Pablo nos alcanza a nosotros hoy, y nos capacita para anunciar con gozo las riquezas inagotables de Cristo.

    Por eso, no te detengas por lo que no eres o por lo que te falta, porque la gracia ya abrió un camino que nadie puede cerrar.

    Levántate cada día con la convicción de que la gracia de Dios está contigo y que, por medio de ella, lo imposible se hace realidad.

    ¡Dios te bendiga!

    Tal vez alguien necesita leer esto hoy. ¡Anímate a compartirlo!

    Y así podrás recibir el versículo del día, la refexión cristiana, la oración del día y las imágenes directamente en tu bandeja de entrada especialmente para ti. 

    Además, recibe gratis el Diario de Estudio y Oración.

      Deseo recibir las oraciones y reflexiones estos días:

      Encuentra aquí todas las oraciones diarias con versículos e imágenes

      Aquí podras encontrar todos los versículos de la Bíblia

      Deja un comentario

      Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

      Scroll al inicio